El jueves, Bitcoin (BTC) volvió a caer por debajo de la marca crítica de $90.000, incluso después de lo que muchos habían anticipado como un evento alcista derivado de la decisión de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) de recortar las tasas en un cuarto de punto. Los analistas de Bull Theory señalan varios factores que contribuyen a este inesperado descenso.
Los analistas señalaron que el recorte de tasas en sí fue ampliamente anticipado por los inversores semanas antes, con una probabilidad del 95% ya incorporada en el precio del mercado.
Antes del anuncio, identificaron que muchos se posicionaron esperando alguna forma de apoyo de liquidez por parte de la Fed, lo que llevó a un repunte en los precios de Bitcoin.
Sin embargo, cuando se confirmó el recorte real y el plan adjunto de compras mensuales de letras del Tesoro por $40 mil millones, muchas de estas "ballenas" —grandes inversores en el mercado— comenzaron a tomar ganancias.
Sumando a la inquietud del mercado estuvo la conferencia de prensa posterior al anuncio del presidente de la Fed, Jerome Powell, donde destacó las debilidades persistentes en el mercado laboral y las preocupaciones continuas sobre la inflación. Además, las proyecciones de puntos de la Fed indicaron la probabilidad de solo un recorte adicional de tasas en 2026.
La situación se agravó por los decepcionantes resultados de ganancias de Oracle, que reportó sus finanzas del segundo trimestre después del cierre del mercado. El gigante tecnológico no alcanzó sus estimaciones de ingresos ajustados, y las proyecciones más altas de gastos de capital llevaron a que las acciones cayeran más del 11% en las operaciones después del horario regular.
Esta caída también impactó negativamente los futuros de acciones estadounidenses, ya que crecieron las preocupaciones de que el auge de la inteligencia artificial (IA) podría estar llegando a su punto máximo. El miedo generalizado por los resultados de Oracle se extendió rápidamente desde las acciones hasta el espacio de las criptomonedas.
En última instancia, los tres factores convergieron para crear una venta masiva significativa: el recorte de tasas ya estaba incorporado en el mercado, las operaciones de liquidez se habían realizado preventivamente, y los comentarios de Powell no proporcionaron la fuerte señal de flexibilización que algunos operadores habían esperado.
Curiosamente, los analistas de Bull Theory afirman que la reciente caída del mercado cripto no es indicativa de un cambio fundamental hacia condiciones bajistas, sino más bien una reacción exagerada basada en altas expectativas previas al anuncio de la Fed.
La Fed ha implementado recortes de tasas tres veces en tantas reuniones, y sus planes para comprar $40 mil millones en letras del Tesoro durante el próximo mes están diseñados para inyectar liquidez en los mercados.
Además, Powell indicó que nuevos aumentos de tasas no están en el horizonte como caso base, y los pronósticos de un sólido crecimiento económico para el próximo año permanecen intactos.
Aunque las ganancias de empleo pueden haber sido sobrestimadas, sugiriendo un mercado laboral más débil, esto podría otorgar a la Fed mayor flexibilidad para aliviar las condiciones monetarias en el futuro si fuera necesario.
Los movimientos actuales del mercado ilustran que el dumping de activos fue impulsado en gran medida por expectativas excesivamente optimistas en lugar de cualquier deterioro en los fundamentos subyacentes.
Mirando hacia adelante, los analistas creen que el próximo año se espera que sea más favorable para Bitcoin y los precios de las criptomonedas en general en términos de liquidez, contrastando marcadamente con las condiciones proyectadas para 2025.
Bitcoin se recuperó por encima de $91.100 al momento de escribir esto, en medio de una creciente volatilidad. Esto sitúa a la principal criptomoneda un 26% por debajo de su máximo histórico de $126.000, establecido en octubre de este año.
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